La Habana, 14 ago (PL) El secretario de Estado, John Kerry, presidió hoy el izamiento de la bandera estadounidense en la embajada de su país en Cuba, lo que para muchos es un presagio de mejores tiempos en los vínculos entre ambas naciones.
En un acto cargado de simbolismo, el jefe de la diplomacia estadounidense vio flotar la enseña, una ceremonia que ocurre tras largos meses de conversaciones entre Washington y La Habana, y que pudiera alcanzar su máxima expresión si el Congreso vota favorablemente por eliminar las leyes del bloqueo impuesto a la isla desde 1961. James Tracy, Mike East y Larry Morris, los tres marines que arriaron la bandera el 4 de enero de 1961, fueron los encargados de entregar a otros tres uniformados la enseña que ahora flota en lo alto del mástil en esta memorable ocasión. Centenares de personas dentro del patio de la embajada y desde el muro del emblemático malecon habanero fueron testigos de lo que es calificado por un hecho histórico. En los alrededores de la sede reporteros, cámaras y fotógrafos de medios de todo el mundo, junto a centenares de cubanos, fueron testigo de un acontecimiento que era demanda de la comunidad internacional durante largos años. Por la parte cubana asitió a la ceremonia Josefina Vidal, directora de la Dirección General de Estados Unidos de la Cancilleria cubana, y José Ramón Cabaña, Encargado de Negocios de Cuba en Washington. HABANA.- «Me siento en casa en nuestra embajada aquí en Cuba». El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, es el protagonista hoy de una histórica visita a La Habana: fue el encargado de izar la bandera de barras y estrellas en la embajada de Estados Unidos en Cuba después de 54 años. «No hay nada que temer, serán muchos los beneficios de los que gozaremos cuando permitamos a nuestros ciudadanos conocerse mejor, visitarse con más frecuencia, realizar negocios en forma habitual, intercambiar ideas y aprender los unos de los otros», sostuvo. Durante su discurso, Kerry dijo que es «verdaderamente una ocasión memorable» y «un día para dejar a un lado viejas barreras y explorar nuevas posibilidades». Kerry: «Nuestros líderes tomaron una decisión valiente: dejar de ser prisioneros de la Historia» «Estamos aquí porque nuestros líderes tomaron una valiente decisión: dejar de ser prisioneros de la Historia», aseguró. Kerry sabe que está haciendo historia: hace 70 años que un secretario de Estado no pisa suelo cubano. Es una visita relámpago: unas 10 horas, pero cargadas de simbolismo. Acompañado por una reducida comitiva de 20 funcionarios, no pasará la noche, sino que al atardecer estará de regreso en Washington D.C. Antes de llegar, el secretario de Estado había prometido que se daría tiempo para «pasear por La Habana Vieja» y «saludar» a todo aquel que se acercara. Cientos de vecinos esperaron al funcionario en el Malecón y en las inmediaciones de la flamante sede diplomática. |
Sin opiniones en esta entrada. Deje la suya.