Ernesto Cordoví : Max Lesnik era un hombre genial con él siempre se podía hablar

Ha muerto Max Lesnik

por Ernesto Cordoví
La noticia me ha tomado por sorpresa, Max era un hombre genial con el que siempre se podía hablar, cuando estaba en Guyana nos llamaba casi todos los días y hablábamos horas, agradezco a Carlos Rafael Diéguez que me puso en contacto con él y le conocí, dos horas estuvo en el programa que hacíamos y recuerdo no quería que se acabara, nuestra amistad de ese día en lo adelante fue inquebrantable, era un excelente interlocutor…
Estando en Cuba todos nuestros encuentros fueron geniales, como se aprendía de él y la historia que en sí atesoraba, aún recuerdo que con más de 90 años no le daba sueño, un día casi amanecemos hablado Taladrid, Yis y yo en una pequeña cafetería sobre la Historia de Cuba y el papel de la emigración, o cuando bien tarde una noche me llamó Robertico que Max no había comido esperándome en la Alianza Francesa y al llegar me dijo: “mira que te demoras chico, no puedo comer tarde así que pide que tengo hambre”…
En cierta ocasión tenía una herida en la cabeza y me pidió que lo llevara a mi hospital a curarse, al llegar allá lo dejé con una enfermera y me puse a conversar con Yis y cuando miramos tenía a todos al rededor hablándole de sus tiempos de la Universidad y de Fidel, Roberto Yis Quiles me dijo: este hombre es genial, donde quiera busca admiradores… Guardo con celo un documental que me regaló sobre su vida y sus enseñanzas…
Ante algunos ataques que me hacían desde Miami un día me dijo: “Has tenido problemas por eso en Cuba?” Le dije: No Max no he tenido problemas… y me dijo: “Me avisas que tú eres como un hijo…” Le agradezco siempre que así fuera… La última vez que lo vi estaba en una piscina haciendo fisioterapia hace poco, me llamó para saludarme, nos reíamos porque incluso haría una directa para los que decían que se había muerto, Max era incansable…
Sin merecerlo me contó porque se fue de Cuba, sus razones, la manera en la que se reencontró con Fidel, sus arrepentimientos y sus ganas de pelear hasta hoy por este país, con más de 90 años iba a las caravanas a exigir el fin del Bloqueo, era un hombre que atesoraba una linda historia, aún por ahí hay quienes lo difamaban y lo odiaban, Max siempre me decía: “deja eso que en nada construye el futuro que queremos”
EPD QUERIDO AMIGO…

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