Con Eliades Acosta en PENSAR LA HISTORIA recordamos el cuarto aniversario de la partida física de Eusebio Leal, Historiador de La Habana mi amigo y compañero. Abordamos igualmente la situación de Venezuela.
El cuarto aniversario de la desaparición física del Historiador Eusebio Leal Espengler, fue recordado en muchas partes del mundo, epro en La HABANA SE HIZO una peregrinación por la Oficina del Historiador de La Habana (OHCH).
La peregrinación encabezada por Perla Rosales, Directora General Adjunta de la OHCH, trabajadores y directivos de la institución y Jorge Leal, hijo del Historiador, partió desde la calle de Madera, del Centro Histórico de La Habana Vieja hasta concluir en el Jardín Madre Teresa de Calcuta, dónde reposan los restos mortales de Leal.
» El ser humano inteligente tiene que ser capaz de preveer y adaptarse a los tiempos que marca, y en eso Leal fue un gran maestro. Es por eso que creer en Cuba, como lo hizo siempre él, su Cuba que el llamo amantisima», dijo Magda Resik, vicepresidenta de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC).
» Leal siempre defendió la idea de que hay que celebrar la vida y la muerte. Es por eso que el sentir de todos los que participamos en este momento es mantener ese concepto de lealtad, para así dar continuidad a ese pensamiento que une a todos en la OHCH, y que tiene que ver con que creemos que el mejor acto de gratitud es continuar dia a día el trabajo que el inició.» , concluyó la también Directora de Comunicación de la OHCH.
Un comentario
Max, saludos, gracias a ti tuve el privilegio y el honor de conocer, entre otros importantes actores y participantes de la revolución cubana -muchos de ellos ya fallecidos- a Eusebio Leal Spengler con quien compartí en múltiples ocasiones, el me llamaba cariñosamente «mi querido Doctorcito» a lo que respondía, jocosamente, «mi apreciado Cardenal» porque como ambos sabemos si bien la Iglesia Católica perdió quien hubiera sido, sin duda, uno de sus más brillantes Cardenales, Cuba ganaría a uno de su más notable y destacado historiador además de un ponente y comunicador como pocos. Lamentablemente, su desaparición física solo puede ser comparable con el poema del compositor y cantautor argentino Alberto Cortez “cuando un amigo se va queda un espacio vacío que no lo puede llenar la llegada de otro amigo». No agrego nada más.
Dr. Alfonso