El presidente de Estados Unidos Donald Trump esta empecinado en eliminar a muchos ciudadanos y entre estos a los más vulnerables, los pobres, que en número de 36 millones son los que padecen más necesidades y penurias.
La realidad es que mediante sus conferencias y twitter diarios, hace todo lo posible para que la pandemia de la covid-19 continúe incrementándose por todo el país con sus incongruentes y anticientíficas declaraciones.
De una simple influenza como lo llamó primero, a querer abrir el país a la economía cuando ya se cuentan casi un millón de contagiados y más de 50 000 muertos (la mayoría pobres, afrodescendientes, latinoamericanos), el magnate sigue ofreciendo fórmulas inconcebibles.
Lo último que ha dicho este señor, que tiene mucha similitud con los antiguos hombres de las cavernas, es que los desinfectantes inyectados pueden eliminar del cuerpo humano al coronavirus Sars-cov-2. Semejante declaración, en boca el presidente de la mayor potencia económica y militar del mundo ha dejado atónitos a científicos y especialistas, que las han calificado de “irresponsable”.
“Veo que el desinfectante lo noquea en un minuto. En un minuto. ¿No habría alguna forma de hacer algo así con una inyección en el interior o casi una limpieza?”, se preguntó Trump en sus declaraciones diarias en la Casa Blanca sobre la epidemia.
“Como pueden ver”, el coronavirus “penetra en los pulmones y tiene un efecto enorme, sería interesante pues verificarlo. Habrá que contactar con los médicos para esto, pero me parece interesante”.
Esta sugerencia suscitó una lluvia de críticas por parte de especialistas. “Esta idea de inyectar en el cuerpo o ingerir cualquier tipo de producto limpiador es irresponsable y peligrosa”, declaró a la cadena NBC el director Vin Gupta, experto en salud pública y especialista en el pulmón y en cuidados intensivos. “Es un método utilizado habitualmente por la gente que se quiere matar”, añadió.
“De la misma manera, también inmolarse con fuego podría ser una alternativa útil”, ironizó el centro de investigación francés Marseille Immunopôle, subrayando que el método sugerido por el presidente estadounidense “¡mataría al virus y a los pacientes!”.
“Dejen de retransmitir estas ruedas de prensa sobre el coronavirus. Ponen vidas en peligro. Por favor, no beban ni se inyecten desinfectante”, twitteó por su parte Walter Shaub, ex director de la oficina federal encargada de cuestiones éticas (OGE) durante la administración demócrata de Barack Obama.
“Las ruedas de prensa de Trump son un peligro para la salud pública. Boicoteen la propaganda. Escuchen a los expertos. Y por favor no beban desinfectante”, fustigó en Twitter Robert Reich, ex secretario de Trabajo del presidente demócrata Bill Clinton.
Además del desinfectante, Trump barajó la idea de usar “rayos ultravioletas” o “una luz muy potente” que se podría proyectar en el “interior del cuerpo” para combatir el coronavirus.
La compañía Reckitt Benckises que fabrica el desinfectante Lysol y numerosos médicos y científicos se apresuraron a advertir al público a no ingiera ni inyectarse este tipo de productos.
“Como líderes globales en productos de higiene y para la salud debemos dejar en claro que, bajo ninguna circunstancia, nuestros productos desinfectantes han de administrarse adentro del cuerpo humano, sea por inyección, ingestión o cualquier otra ruta”, indicó la empresa.
Como se dice, al Trumglodita se le fue la catalina.












Un comentario
Seria mejor desinfectar el cerebro a este troglodita, que quiere acabar con con el pueblo norteamericano.