Decir que Cuba es una dictadura es una manipulación, una idea absurda, es no saber lo que significa, lo que es una dictadura, pero nada, voy pa’ ti.
– El bloqueo económico, comercial y financiero de EE.UU. contra Cuba es una política hostil, unilateral e ilegal, condenada por más 30 veces en la ONU. No es un simple «embargo» es un BLOQUEO que persigue asfixiar a la economía cubana mediante sanciones extraterritoriales que afectan a terceros países.
– El gobierno revolucionario nunca ha «confiscado ilegalmente» propiedades, sino que llevó a cabo una Reforma Agraria y nacionalizaciones bajo soberanía, como derecho de todo pueblo a recuperar sus recursos de manos de monopolios extranjeros. EE.UU. respondió con agresiones, sabotajes y el bloqueo, no al revés.
– Es falso que Cuba pueda comerciar libremente. El bloqueo prohíbe transacciones en dólares, créditos internacionales, importación de tecnologías clave (incluyendo medicamentos) y castiga a empresas que negocien con la isla (Ley Helms-Burton).
– Las remesas y envíos desde Miami son limitados y regulados por EE.UU., no un gesto de «ayuda», sino migajas que no compensan los daños de un bloqueo que ha costado más de $159,000 millones a Cuba (según cifras oficiales).
– Cuba tiene un sistema electoral participativo y popular, donde no se compra con dinero el acceso al poder. El Partido Comunista no postula candidatos: son elegidos en asambleas de barrio, con participación masiva. Díaz-Canel fue electo por la Asamblea Nacional, cuyos miembros surgen de votación directa.
– En Cuba no hay «elite criminal», sino un pueblo que resiste. Los líderes cubanos viven con modestia, sin fortunas personales, bajo el escrutinio público. ¿Dónde están sus cuentas en paraísos fiscales, sus yates o sus palacios? La verdadera cleptocracia está en los gobiernos neoliberales que acusan a Cuba.
– La FEU (Federación Estudiantil Universitaria) es una organización históricamente revolucionaria, no un grupo contrarrevolucionario. Las críticas a políticas específicas (como las tarifas de ETECSA) se canalizan dentro de las instituciones, no mediante acciones al servicio de injerencias extranjeras.
– Cuba garantiza educación gratuita y de calidad para todos, algo inimaginable en países capitalistas donde los estudiantes terminan endeudados. Las ajustadas medidas económicas son consecuencia del bloqueo, no de «opresión».
– Cuba cumple con sus compromisos en la medida posible, pese al bloqueo. Muchos países (incluidos aliados) comprenden que las dificultades son impuestas por EE.UU. y han reestructurado deudas en solidaridad.
– Argentina, como nación soberana, maneja sus relaciones con Cuba sin injerencia. Recordemos que fue el gobierno de Macri (aliado de EE.UU.) el que impulsó demandas contra Cuba, mientras otros gobiernos latinoamericanos reconocen la deuda histórica con la solidaridad cubana (ej: médicos, alfabetización).
– Cuba no reprime: defiende su soberanía frente a intentos de desestabilización financiados por EE.UU. (como los fondos para la «subversión» bajo la Ley de la Democracia Cubana).
– Mientras EE.UU. tiene millones en pobreza, cárceles repletas y policía racista, Cuba exhibe cero analfabetismo, mortalidad infantil más baja que EE.UU. y médicos en todo el mundo. ¿Quién viola realmente los derechos humanos?
– En Cuba no habrá «elecciones al estilo imperial», donde los ricos compran campañas y medios. La democracia cubana se ejerce en las calles, en los Comités de Defensa de la Revolución (CDR), en los sindicatos y en la participación directa.
– Los que piden «cambio de sistema» buscan restaurar el capitalismo neocolonial, donde Cuba volvería a ser un prostíbulo y casino para mafiosos, como antes de 1959.
La Revolución Cubana es irreversible. El bloqueo es un crimen, y su levantamiento es una demanda mundial. Los jóvenes cubanos, lejos de ser «manipulados», son herederos de Mella, del Che y de Fidel. Su lucha es por mejorar el socialismo, no por destruirlo.
¡Cuba no está sola! Millones respaldan su derecho a existir sin rendirse al imperio. Patria o Muerte. ¡Venceremos!
Fuentes para profundizar:
– Informes de Cuba sobre el bloqueo (Cancillería de Cuba).
– Resoluciones de la ONU contra el bloqueo (1992-2023).
– Libro «La guerra económica contra Cuba» (Salim Lamrani).