Traducido del Más Allá por Max Lesnik.
¡De película!
El cine como entretenimiento para las masas, ha sido utilizado desde sus comienzos allá por los primeros años del pasado Siglo XX, como uno de los mejores instrumentos de propaganda tanto al servicio de causas políticas negativas- como el fascismo- que para la exaltación de valores positivos para la humanidad, como el verdadero socialismo y la verdadera democracia.
Por otra parte Hollywood desde sus inicios, se convirtió en una fábrica de sueños que cautivaba a multitudes, presentando a Estados Unidos como la nación “modelo” a imitar por todas las naciones del orbe, país donde con solo tener cinco dólares en el bolsillo se podía llegar a amasar una fortuna millonaria y alcanzar la plena felicidad. ¡A otro con ese cuento!
Y por supuesto que Hollywood también ha incursionado en el terreno de la política produciendo películas que han provocado controversias encendidas, como es el caso de una cinta del año 1962 titulada en inglés “The Manchurian Candidate”- adaptación de una novela de política-ficción- en la que según el argumento, el hijo de una prominente familia norteamericana conservadora, personaje interpretado por el actor Frank Sinatra, es hecho prisionero de los comunistas en la guerra de Corea y cuando es puesto en libertad y regresa a Estados Unidos, incursiona en la arena política presentándose como candidato presidencial con un discurso extremista de derecha, cuando en realidad es un instrumento de la extrema izquierda, que en Corea- según la novela- los comunistas le han “lavado el cerebro”, convirtiéndolo en una especie de “Caballo de Troya” con el propósito de instalarlo en la Casa Blanca y así conquistar el poder en Estados Unidos.
Traigo el tema de la película “El Candidato de Manchuria” porque anoche martes, en uno de los programas nocturnos de los Cloacas de Miami- en el de “Taconera Salazar” para ser exactos- uno de los invitados al panel desarrolló la teoría de que el tal “Disidente” Rodiles, lejos de ser un verdadero opositor al gobierno cubano, era en realidad una especie de” Manchurian Candidate” manipulado por la Seguridad del Estado de Cuba. Según este distinguido miamense lo de la golpiza al tal Rodiles- ahora disfrazado como el hombre de la máscara de trapo- es una tremenda farsa montada por los comunistas para tomarle el pelo a los tontos de Miami que se van siempre con la “pelota “podrida”. Y por ahí van los tiros.
Pero yo como viejo Duende que soy, no creo en teorías conspirativas cualquiera. Tampoco creo en brujas ni en fantasmas. Pero de que los hay, los hay.
Y hasta mañana jueves amigos de El Duende que con mi gallo me voy cantando a mi tumba fría. Bambarambay.
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