Los amantes de la pelota con los ojos puestos en el Preolímpico, por Félix Hernández

Béisbol y… punto final.
PARA QUE DESPUES NO DIGAN…
Por: Félix Hernández Rodríguez.
Voy, sin demora, a completar la frase que encabeza este comentario: para que después no digan que no lo dije… Sí lo voy a decir porque lo afirmo con el mayor optimismo, pero sin excesos, aunque los términos medios son muy difíciles   es de encontrar y, peor aún, aplicar con la madurez suficiente. Tan malo es pecar por exceso como por defecto.
La mesa del mundo del béisbol está servida apetitosamente con el Preolímpico de América, donde participan equipos de ocho naciones de las más reconocidas a nivel universal en esta disciplina deportiva, cuyo origen se rumorea de diversas maneras.
Se comenta que las antiguas civilizaciones se divertían con un juego donde empleaban un palo y una bola. No obstante, la evolución ha sido en espiral, tanto que llegó a alcanzar una práctica organizada. Hoy por hoy la pelota tiene un público multimillonario en todos los continentes. Tal es la aceptación que es un deporte Olímpico y eso es como decir: alcanzó la gloria, de ahí para allá no hay más pueblos.
Especialmente en la región de las américas el béisbol es pasión desbordante. Por estas y otras muchas razones es por lo que los amantes de la pelota tenemos los ojos puestos en el Preolímpico que está por comenzar en la Florida, Estados Unidos, en fecha tan próxima como es del 31 de mayo al 5 de junio, donde, además del país sede, estarán Cuba, Puerto Rico, República Dominicana, Canadá, Venezuela, Colombia y Nicaragua.
Si sumanos a México, que ya está clasificado para las Olimpiadas de Tokyo, Japón, podemos afirmar que esos nueve conjuntos son la máxima representación del béisbol en esta parte del mundo, lo que le imprime expectativas extraordinarias al torneo de la Florida.
Millones de aficionados están apostando en estos momentos por la clasificación de su equipo favorito. Claro, el favoritismo es una cosa y las posibilidades competitivas de cada selección es otra. Por eso los invito a despojarnos de gustos y preferencias y vayamos a un análisis objetivo de probalidades.
Mi criterio clava los spikes desde una condición de amante del béisbol y dada esa condición si en algo no coincido con los especialistas u otros aficionados les ofrezco mis disculpas y respeto anticipadamente. El Preolimpico contempla dos grupos. En el A aparecen Estados Unidos, República Dominicana, Puerto Rico y Nicaragua, mientras que en el B están: Cuba, Canadá, Venezuela y Colombia.
En cada grupo juegan una sola vuelta, es decir, cada equipo sostendrá tres partidos. Los dos primeros lugares de cada bando (cuatro conjuntos en total) pasan a una segunda fase, llamada super ronda, para sostener un todos contra todos. Serían otros tres encuentros. Quiere decir que el evento contempla seis confrontaciones.
El que más victorias logre, sumados los resultados de las dos etapas, se va para las Olimpiadas. Entre tanto, los que se adueñen del segundo y tercer puestos tendrán pasaje asegurado para asistir al clasificatorio de México que otorgará una última plaza y… chirrín, chirrán. La fiesta se acabó.
Los pronósticos son parte consustancial a cualquier deporte, pero pronóstico al fin entraña un altísimo riesgo y propenso a polémicas interminables, mucho más cuando la calidad de un evento es extrema, como es el caso que nos ocupa. Sin embargo, la ‘’aventura’’ de decir quién sí y quién no resulta verdaderamente apasionante. A mi me fascina. ¿Y a usted? El día que a la pelota le falte la discusión fraternal, seria, respetuosa, decente ese día pierde uno de sus mayores atractivos para el divertimiento. ¿Si o no?
Los invito a situarnos al borde del precipicio. Acompáñenme pero sin ‘’empujarnos’’. Modestamente considero que por el grupo A pueden tener un poco más de posibilidades de avanzar Estados Unidos y Puerto Rico. Ninguno de los dos países ha enseñado las uñas pero a juzgar por el rosters que presentan nadie dude que son dos trabucos. República Dominicana ‘’ensayó’’ con Cuba en partido amistoso y no le fue nada bien, a pesar de poner en el terreno a los jugadores regulares. Descarto a Nicaragua porque considero que es un equipo menor con relación a los otros tres adversarios.
Sigo en la primera Vuelta. Por el bando B considero que deben continuar en juego Cuba y Canadá, sin descartar totalmente a Venezuela que viene ‘’armado hasta los dientes’’ al contar con figuras que tienen un nombre muy bien ganado como jugadores profesionales, tanto de ligas menores como mayores. A Colombia no le veo muchas opciones para triunfar, independientemente a que debajo de cualquier piedra sale un alacrán.
Ese es el portal de la casa. Pasemos al interior, a la sala. Sentados, con mente fresca y corazón abierto. A estas alturas del certamen se aprieta el zapato. Así llegamos a considerar que en la llamada super ronda pudieran verse las caras Estados Unidos, Cuba, Puerto Rico y Canadá. Insisto en que pronósticos son pronósticos.
Pienso que aquí es mucho más dificil ‘’adivinar’’ la suerte de cada uno de los integrantes de este cuarteto para respetar. Dejo por sentado que cualquiera de los cuatro puede superar al adversario en esta férrea discusión por el boleto para Tokyo 2021. Con toda la carga objetiva y subjetiva que pueda tener, arribo a la conclusión de que entre Cuba y Estados está la decisión final. Aportemos algunos argumentos.
Estados Unidos conformó una nómica con algunos jóvenes valores de las ligas menores y con veteranos de las grandes ligas. Todos tienen un aval reconocido como peloteros de talla extra. Por lo que se ha informado, el equipo ha tenido una adecuada preparación, encabezada por el prestigioso exjugador de la MLB y experimentado manager de la pelota élite norteamericana, Mike Scioscia.
Scioscia viene con fuertes aspiraciones (como todos los mentores, por supuesto), según sus propias palabras. Así lo dijo: «Es una experiencia verdaderamente única en la vida que, con suerte, terminará cuando Estados Unidos gane una medalla de oro olímpica! «. En las Olimpiadas de Sdney 2000 EE.UU se coronó campeón al dominar al equipo cubano cuatro carreras por cero. En el juego precedente el conjunto antillano había dominado al norteamericano seis carreras por una. El manager, de 62 años de edad, fue director de Los Ángeles  durante 19 temporadas, amasando una marca de 1650 victorias y 1428 derrotas para un average de 536.
Cuba, por su parte, atesora 3 medallas de oro olímpicas y 2 de plata. Es históricamente el país más ganador de la universal cita deportiva. A ello suma el liderazgo protagonizado en juegos centroamericanos, panamericanos, mundiales, series del Caribe, Clásico Mundial, entre otros eventos donde ha puesto a prueba su valía en el mundo beisbolístico. Aún así no faltará quien diga que en los últimos años ha mermado cualitativamente sus resultados en eventos internacionales. Es verdad, pero ojo, hay suficiente maestría.
El equipo de Cuba integrado para el Preolímpico reúne a jugadores noveles y veteranos que tienen muchísima calidad demostrada dentro del país, en competiciones fuera del territorio nacional y en ligas profesionales de otras naciones, particularmente asiáticas y latinoamericanas. Su mirada y pensamiento están puestos en las Olimpiadas y para ello se han preparado muy bien, al decir de los federativos, especialistas y peloteros.
El mentor, Armando Ferrer, es un hombre que ha dedicado su vida al béisbol y tiene cartas credenciales reconocidas en series provinciales, nacionales (dos subcampeonatos) y también en eventos internacionales: Rotterdam, Harlem, y la Intercontinental de Barcelona. Exhibe experiencias adquiridas en Italia, México y Rusia. Ferrer, de 67 años de edad, en declaraciones públicas afirmó que sus pupilos se presentarán con todo en el Preolímpico para salir victoriosos y no tener que asistir a la clasificatoria en tierra azteca.
Lo comenté y permítanme recordarlo. Para el equipo cubano ganar en el Preolímpico el boleto de libre tránsito para Japón sería lo ideal, pero si ocupa una plaza para el clasificatorio de México por igual sería un buen resultado. Ninguna de las dos opciones serán fáciles. Pensar otra cosa es cuestión de ingenuos.
Por eso, reitero, la mesa está servida. Piensen ustedes, conformen su pensamiento y solo les pido que en sus valoraciones modestamente tengan en cuenta estas consideraciones que pueden o no estar cerca de la verdad. Sí, pueden estar cercanas o lejanas porque la verdad absoluta, en última instancia, la dirá el terreno.
Visto el caso y comprobado el hecho: punto final.

Preolímpico de béisbol de Florida será transmitido en la Televisión Cubana

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *