Hoy entrego mi columna a la colega periodista Dra Ana Teresa Badia. Y mas abajo publico un artículo del colega Lazaro Farinas sobre el mismo tema.
Por Ana Teresa Badia
La reciente intervención del diputado Emilio Interián Rodríguez en la Asamblea Nacional del Poder Popular ha marcado un punto de inflexión en el debate público cubano.
👉 Sus palabras, sinceras, directas y sin rodeos, ponen sobre la mesa lo que muchos ciudadanos perciben en su vida cotidiana: la empresa estatal no es todo lo eficiente que debería, la ganadería no despega, las mypimes sostienen las primeras necesidades -mypimes que creó el gobierno, por cierto, que no son ilegales-, y los campos que permanecen casi vacíos.
👉 El ejemplo que utilizó -que la leche no puede valer menos que el agua- resume con crudeza las distorsiones de un sistema productivo que no paga bien a los productores. Tras recorrer kilómetros en distintas provincias, yo misma que no sé mucho de eso aseguro haber visto muy poco sembrado y una ganadería en estado crítico. No es un diagnóstico complaciente, pero sí realista.
👉 Más allá de la polémica, lo esencial es el papel que debe desempeñar un Parlamento. Un órgano legislativo no puede limitarse a asentir en silencio, ni a reproducir discursos oficiales sin cuestionamiento. La función de un representante como Interián es interpelar, señalar las fallas y exigir soluciones. En ese sentido, su intervención abre un espacio para la crítica constructiva. ¿No se convocó a analizar el Programa de gobierno? Entonces, ese hombre dijo lo que piensa.
👉 La verdad incómoda siempre será preferible a la mentira complaciente. Reconocer la ineficiencia no es un acto de traición, sino de responsabilidad. Solo a partir de un diagnóstico honesto se pueden diseñar políticas efectivas que devuelvan dinamismo a la economía cubana y la confianza ciudadana en el gobierno.
👉 En tiempos de crisis, un Parlamento que debate y cuestiona es más útil que uno que calla. La intervención de Emilio Interián Rodríguez lo ha recordado con claridad: el silencio es más dañino que la verdad.
📌 A él no tengo el placer de conocerlo, pero como he sido igualmente ametrallada por perfiles anónimos y dañinos, siento el deber de escribir esto. Sé lo que se siente cuando se dice la verdad y te apabullan con supuesta militancia. 📌¿Qué hace más daño las verdades de Interián o la doble moral simuladora de los “sí jefe, todo bien”?
📌¿Qué mentira dijo ese hombre? No lo oí pedir el regreso a ningún modelo, solo puso un mínimo ejemplo que también es cierto.
📌 Yo creo que cada vez más este país debe estar preparado para hablar entre todos, para cultivar el debate político, pero por sobre todo, para estar unidos y cercanos, a pesar de diferencias.
🎉 Y ¿saben por qué lo dijo? Porque todavía tiene ganas de trabajar y transformar.
*La foto la tomé de Trabajadores, de Alejandro Acosta.
@destacar
COMENTARIOS DESDE MIAMI. Por Lazaro Farinas
EL DIPUTADO
Hace unos días en la sesión ordinaria de la Asamblea Nacional de Cuba, vi que a un diputado, cuyo nombre desconozco, le dieron la palabra y el hombre, ni corto, ni perezoso,
empezó libremente y sin interrupciones a decir todo lo que pensaba sobre el actual sistema económico cubano. Lo que dijo el diputado eran verdades axiomáticas. Habló de lo divino y de lo humano y al terminar, recibió un fuerte aplauso del resto de los diputados.
Para aquellos que se pasan la vida diciendo que en esa Asamblea nadie puede criticar las políticas del gobierno, esto fue un fuerte tapaboca . El hecho de que muchos diputados prefieran mentir o decir cosas agradables, aunque ellos las vean desagradables, no quiere decir que no se pueden expresar. A los que se callan o mienten solo les importa el hecho de no caer desagradables y por lo tanto, tienen miedo a que los expulsen, aunque en realidad, lo único que necesitan es decir lo que piensan libremente y sin subterfugios, complazcan o no al resto de los mismos.
Para la morralla que se pasa la vida atacando la falta de libertad de expresión en Cuba, lo que tienen que hacer es caminar por las calles de las ciudades y darse cuenta de que los ciudadanos protestan y critican al gobierno sin que nadie los calle. He llegado a ver a un ciudadano diciéndole pestes a un policía y no pasarle nada, pero si uno aquí en EEUU se atreve solamente a quejarse con un agente, tiene cien papeletas para terminar arrestado.
Considero que el Diputado en cuestión,no solamente fue consecuente con su pensamiento, sino que tuvo el valor de expresarlo con firmeza y claridad. Me alegro mucho por él y por todos los que lo aplaudieron. La Cuba de hoy no es la misma de años atrás y ojalá que en la próxima reunión de la Asamblea sean muchos los diputados que lo imiten. Felicidades a todo mi pueblo cubano en estos días tan difíciles, y esperemos que el 2026 les traiga más FELICIDAD !!!










