Cocodrilo Alcatraz, por Lázaro Fariñas

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COCODRILO ALCATRAZ
A principios de los sesenta del pasado siglo, acabado de llegar a este pantano, unos amigos me invitaron a un paseo dentro de los Everglades. Los Everglades son una inmensa zona pantanosa al oeste de Miami. Es un territorio que cubre gran parte del Sur de Florida, y que además, está apenas a minutos, manejando hacia el
oeste, de la ciudad de Miami. Es más, una parte de Miami está construida sobre este inmenso pantano.
Tengo que decir que mi corta visita a esos pantanos se me creó una gran inquietud, inseguridad y miedo. Es una zona salvaje donde existen numerosas especies de serpientes venenosas, panteras negras, cocodrilos, tembladeras, jabalís salvajes, caimanes, mosquitos y no sé cuantos peligros más habitan ese lugar. Lo he atravesado en decenas y decenas de ocasiones con mi familia por una carretera que va hacia la costa oeste de La Florida, siempre preocupado porque el carro se rompa, y me sienta rodeado por aquella desolación pantanosa.
Cuento esto, porque se acaba de inaugurar un campo de concentración para inmigrantes latinos en el medio del mismo lugar, a 50 millas de distancia de Miami y a 50 millas de las ciudades de la costa oeste del Estado de La Florida. Le han puesto el nombre de «Cocodrilos Alcatraz». Bien le podrían poner el nombre de El Infierno de los Everglades o rebautizarlo con el nombre de alguno de los Campos de Concentración de la Europa fascista. Tiene una capacidad para entre 3,500 a 5,000 reclusos. Si alguien se llegara a escapar de ese infierno, se encontraría con un paisaje muy hostil y peligroso. Está creado con esa tan cruel mentalidad hacia los inmigrantes, muchos de los cuales se están escondiendo como ratas en su domicilios y otros lugares para no ser detectados por los sicarios de las autoridades. Ningún latino está fuera de la vista de estos racistas blancos a los que Mr. Trump les ha dado la autoridad para arrestar a cualquiera que le luzca diferente. Para estas personas «el sueño americano» se les ha convertido en «la pesadilla americana».
Lo triste de todo esto no son solamente las injusticias que se están cometiendo con este grupo de personas, sino que muchos de los hoy perseguidos fueron perseguidores de las personas que alentaban sobre el peligro que representaba el que llegara de nuevo a la presidencia el que ahora es Presidente. No quieres caldo, pues tres tazas !!!…

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