Carlos Lazo: vinimos a Cuba a abrazar a la madre y a sembrar jardines de esperanza

Carlos Lazo está en Cuba, hoy publicó en su muro de Facebook los detalles de porque se encuentra en la Patria que  lo vio nacer. Continuo  mis contactos con él desde el INTERNET a través de wasap y esta mañana me escribía el tocallo un breve mensaje:

«Un abrazo para todos Carlitos. Aquí estamos, esperando cumplir la cuarentena y prestos a poner nuestro granito de arena para ayudar en lo que se pueda»

¿Por qué vinimos a Cuba?
En la hora de la adversidad, cuando la madre está necesitada, la obligación de los hijos es ayudar a la madre. Nuestra madre Cuba atraviesa por uno de los períodos más difíciles de su historia. Sus hijos e hijas, los que aman y construyen, tienen un deber sagrado; tender una mano solidaria en medio del infortunio. Salvar a nuestra madre, Cuba.
Eso es la Patria, hermanos. Una idea, una comunidad de intereses que trascienden gobiernos o ideologías. La Patria son tu familia y tus vecinos. La Patria son las vivencias que moran en tu alma y que te hacen ser lo que eres hoy. La Patria es esas calles y esa gente y eres tú que cargas con todos ellos por el mundo. Todos los que sientan ese latir dentro de sí, esa llama de amor, todos son hijos de la madre Cuba.
Incluso aquellos descarriados que, confundidos, han abrazado el odio, esos, como hijos pródigos, también encontrarán los brazos abiertos del hogar materno. ¿Qué no le perdonaría una madre a su hijo? Si este hijo trae amor, comprensión y solidaridad, también tendrá un espacio en esta casa de todos. Los hijos agradecidos tienen un sagrado deber, una obligación: ¡Ayudar a la madre! Por eso estamos aquí, para construir #PuentesDamor.
Quizás nuestra ayuda sea una gotica minúscula en este mar de necesidades y urgencias. Quizás no podamos cambiar el mundo. Pero, lo que si es seguro, es que cambiaremos el mundo de alguna persona. Lo que si es seguro, es que lograremos dibujar una sonrisa en la cara de un niño. Y quizás, con la ayuda de Dios, hasta puede que esa gotica de humilde ejemplo fructifique. Y puede que muchas otras gotas de solidaridad y ternura, se conviertan en una marea de amor imparable.
Al final, en este viaje que es la vida, todos somos miembros de la misma familia humana. Pero en ese linaje ancestral, los hermanos carnales, son aquellos con los que jugamos de niños; y sus hijos, y los hijos de sus hijos; ahora y por los siglos de los siglos. Y Cuba, es la misma madre de todos.
Por eso vinimos a Cuba; a abrazar a la madre y a sembrar jardines de esperanza.
Carlos Lazo
14 de agosto de 2021

Un comentario

  1. Bienvenido a la madre patria con su mensaje de amor.
    Los cubanos que resistimos en esta isla de todos, solo entendemos de PAZ Y AMOR NO DE BLOQUEO NI DE IMPOSICIONES.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *