Vale la pena publicar los apuntes de Teresa Melo. Los asumo como nacido de lo más intimo de la Patria, en momentos que los desagradecidos pretenden ultrajar la historia y la verdadera creación del arte y la cultura cubana. Suscribo aquí en mi columna, desde MI RINCÓN, de RADIOMIAMITV TODA la reflexión de la poeta y editora cubana, Teresa Melo, una de las voces líricas primordiales de la década de los ochenta. Editora y directora de Ediciones Santiago, que ha recibido numerosos premios a lo largo de su carrera de autentica artista y creadora cubana
Me vienen a convidar ¿a…?
Ha sido mi silencio y ahora mi palabra. Ambos exclusivamente míos. Creo en el diálogo y en los puentes. No es la primera vez que lo digo. Pero también sé qué tipo de personas sólo buscan imponer un monólogo, y con insultos y bloqueos en redes, hablando de libertad de expresión, la sabotean. Y sé quiénes colocan materiales contaminados para que los puentes se tambaleen y caigan.
Diferencio los hechos de estos días. NO me representa quien insulta la bandera, y tiene como aliados la vulgaridad, el desprecio, la conducta antisocial y exhibicionista, aunque aparezca bajo el maquillaje de artista. En el artista es la obra quien habla, y para que hable tiene que ser creada. A lo dicho por ellos de que son los deseos de «11 millones de cubanos» réstenle mi número. Yo no soy San Isidro. No me representa.
En segundo lugar, y bien diferenciado: entre quienes estaban ayer frente a la sede del Ministerio de Cultura había jóvenes artistas con inconformidades y el deseo sincero de un diálogo, y muchas otras personas y medios. Yo no estaba allí, pero sí algún amigo y gente que conozco y respeto. Y otros que no buscaban entendimiento: basta leer decenas de comentarios que ahora tildan a los 30 elegidos por ellos mismos como traidores, por haber dialogado.
La ingenuidad tiene un alto costo. En estos difíciles meses para Cuba y el mundo muchos artistas e intelectuales cubanos hemos sido denigrados y amenazados. Todavía lo somos, porque basta un atisbo de compromiso con nuestro país y su gente para ser blanco de los más bajos ataques, en nombre de la «democracia», claro, y la libertad de expresión. Los más furibundos se muestran escasos de cultura elemental, con un rosario lamentable de groserías y gritos que denuncian sus reales deseos. Los estamos leyendo en este mismo instante.
Todo aquel que considere que mi país tiene que entregarse, NO cuente conmigo. Quien obvie de cualquier diálogo la palabra Bloqueo, NO cuente conmigo, y por supuesto, NO cuente conmigo quien no le reconozca a Cuba su derecho a resistir y ser mejor por ella misma.
Ha sido mi silencio reflexivo y ahora mi palabra de poeta, por CUBA. Con mi libertad de expresión. O sea, mi libertad.
Poetisa cubana Teresa Melo
Leo, ante publicaciones respetuosas, comentarios con las peores ofensas, malas palabras, imágenes degradantes. No puedo explicármelo cuando son cubanos: aplaudir actos contra Cuba de quienes los ven como ciudadanos de quinta categoría. Parece que debo decirlo más claro: NO admito en mis espacios a quienes se alegran de ver quemar la bandera cubana; a quien ignore la entrega de nuestros médicos, como los he visto en sitios adonde nadie más acude; a quien me llama “oficialista” pero muestra su “arte” politizando con la bandera americana (si no crearan estos escándalos ¿irían a verlos en una galería?); a quien aplaude las supuestas damas (diccionario, por favor) que vi personalmente arrastrar nuestra bandera y subir tranquilas al transporte: hicieron su foto, cobraron; a quienes expresan odio por color de piel, elección sexual o ideas; a quien da su like a un paisaje y queda indiferente ante un bombardeo, violación, muerte de niños o el mismo paisaje incendiado; a quien no condena actos y palabras de curas pederastas porque fue un ser humano y no dios. Incluyo a los que por aquí se solapan tras falso patriotismo para enmascarar un alma capitalista; a quien niega la relevancia de nuestras instituciones pero vive de ellas; al que destruye lo que con esfuerzo se construye y al que mira indolente.
Y más… A quien bloqueo aquí, ya lo he bloqueado en mi vida. Si creen que me quedaré sin amigos: tengo orgullo del excelente grupo que me acompaña en las redes, en el trabajo cultural y en la vida, donde están todos los credos, ideas, colores, profesiones, fe de vida, elecciones y valentías: diversos y respetuosos por lo que nos une. Esta frase de Paul Valéry ha tenido muchas lecturas: “El león está hecho de cordero digerido”. Hoy le doy esta: ni esos que reseño son leones ni yo soy cordero, así que a mí no me pueden comer.
Excelente poeta cubana, hermosa mujer, digna de tiempos como los de ahora. No podrá la crápula contra lo más grande que es nuestra Revolución de Pueblo Humilde, decente, revolucionario, defensor de lo auténtico.
2 respuestas
La pandilla de San Isidro, sus acciones los califican.
Ese grupúsculo de desarmados, no podrán jamás con un pueblo en REVOLUCIÓN SOCIALISTA.
Excelente poeta cubana, hermosa mujer, digna de tiempos como los de ahora. No podrá la crápula contra lo más grande que es nuestra Revolución de Pueblo Humilde, decente, revolucionario, defensor de lo auténtico.